Admitámoslo, reciclar nos hace bien. Con una crisis climática que amenaza a todos los habitantes del planeta, es difícil no darse cuenta del valor que tiene cuidar el medio ambiente. En un estudio reciente, el 66 por ciento de los consumidores afirma que la sostenibilidad es una de sus prioridades a la hora de realizar una compra.
Cada vez está más claro que hoy en día hay un mayor interés por reducir la cantidad de residuos y prescindir por completo de los plásticos. Saber que una compañía comparte esos mismos valores es esencial en el mundo con conciencia ecológica en el que vivimos.
La industria del empaque está experimentando un renacimiento de la sostenibilidad en casi todos los sectores, que es impulsada por la demanda de más opciones de empaque en papel por parte de los consumidores, así como por la nueva legislación destinada a reducir los desechos. Pero los grandes cambios traen gran confusión.
El «lavado de imagen verde», es decir, cuando una marca exagera o sobredimensiona sus declaraciones sobre sostenibilidad, es un problema desde hace décadas. Puede causar una pérdida masiva de la confianza del público y, en los casos extremos, se ha llegado a exigir a las compañías que asuman su responsabilidad.
Los mensajes ambiguos también hacen que los consumidores desconfíen. Las marcas que incluyen una gran variedad de mensajes irrelevantes o sobre la sostenibilidad en sus envases, pueden hacer que las personas se pregunten qué significa todo eso.
Entonces, ¿cómo asegurarse de que los mensajes sobre la sostenibilidad de sus envases no sean confusos?
Recuerde estos consejos para que sus mensajes sean claros:
Sea honesto: el lavado de imagen verde es fácil de evitar. La verdadera sostenibilidad empieza por una comunicación honesta. Sea sincero con los consumidores sobre el contenido de sus empaques y sobre si son reciclables.
- Sea conciso: evite términos técnicos o lenguaje especializado que puedan confundir o disuadir a los consumidores de desechar correctamente los materiales del empaque.
- Sea proactivo: anticipe las preguntas e inquietudes que el consumidor pueda tener sobre los materiales de los empaques y aclárelas de antemano.
- Busque orientación: considere consultar a expertos sobre formas nuevas y más sostenibles de empaquetar sus productos.
Por último, no use la palabra «biodegradable». Evite este término en los empaques a toda costa, especialmente, en los materiales plásticos. En algunos estados, incluso es ilegal usarlo en los envases porque no hay consenso sobre cuándo se descomponen los materiales o si son liberadores de toxinas.
En su lugar, utilice «apto para compost» cuando corresponda. Si su empaque es apto para compost, ¡dígalo! Los envases aptos para compost están claramente definidos como aquellos que se descomponen en un plazo corto de tiempo en materiales no tóxicos. Un material debe cumplir criterios rigurosos para ostentar esta categoría, por lo que merece la pena mencionarlo.
Premier es líder en empaques sostenibles y queremos que nuestros clientes elijan siempre el contenedor reciclable. Contáctenos hoy mismo para conocer las opciones de empaque sustentable.