Sobrevivir y superarse

Cada año trae sus propias vicisitudes, independientemente del tipo de negocio que administre y del lugar en el que se encuentre. Es parte de la fluctuación natural de las cosas. Pero vaya si el 2020 no nos tenía preparadas unas cuantas sorpresitas. No consideramos necesario recapitular todo lo que ha ocurrido este año, usted conoce bien el mundo en el que nos toca vivir en este momento. Sin embargo, quisimos hacer un resumen de la incidencia que tuvieron en Premier Packaging los problemas específicos de este año y de lo que significó para nosotros sobrevivir y progresar en medio de una pandemia global.

Un hombre operando un montacargas en un depósito

Tan pronto como se instauró la cuarentena en la mayor parte del país, aquí, en Premier supimos que estábamos en una situación particular. Como nos encargamos de fabricar y distribuir una línea de productos de empaque de características únicas, además de especializarnos en logística de la cadena de suministro, no podíamos saber con certeza hasta qué punto nos afectaría esta situación. Como las ventas en línea habituales se dispararon y muchas tiendas que jamás habían siquiera pensado en las ventas por Internet aceleraron la creación de sitios de comercio electrónico, la demanda de nuestros servicios experimentó un aumento sin precedentes.

Aunque nuestra temporada laboral más álgida suele comenzar en otoño, en el 2020 pasamos el año completo trabajando a toda máquina. Nuestras ventas subieron por las nubes, por lo que nuestros equipos trabajaban durante las noches y los fines de semana en el marco de una producción ininterrumpida, que funcionaba las 24 horas de los 7 días, para poder cubrir esta nueva demanda. Tuvimos suerte durante este período porque pudimos ofrecer un beneficio y un servicio que todos parecían necesitar con urgencia. Esto no nos ha pasado inadvertido y, por eso, sentimos una sincera gratitud hacia cada cliente, proveedor, empleado y socio con quien hemos trabajado, no solo durante estos tiempos difíciles, sino en todos los demás años.

Un empleado trabajando en la planta de producción

No vamos a restarle mérito a nada de lo que logramos en estos últimos meses. Mientras nuestra compañía explotaba para poder responder a las exigencias del comercio electrónico, nuestros equipos de Recursos Humanos y de Administración trabajaban incontables horas extras para ayudar a satisfacer acabadamente la demanda de nuestros servicios y cumplir con las normas establecidas por los CDC.  Así es, tomamos el toro por las astas y brindamos a nuestros clientes todo lo que nos fue posible ofrecer, al tiempo que dimos la bienvenida a todos los nuevos clientes que pudimos recibir. Frente a situaciones como esta, es fundamental enfrentar los problemas con buena voluntad y una actitud flexible. Si no demostramos buena voluntad, ¿cómo podemos perdonarnos las faltas, los errores y los percances? Y sin una actitud flexible, ¿cómo podemos pasar de una idea a otra y estar preparados para enfrentar nuevos desafíos?

¡Es momento de seguir trabajando arduamente y prepararnos para una temporada laboral desbordante de éxito!